Un fin de semana de Septiembre...

El pasado fin de semana han sucedido varios eventos importantes. Por un lado, en Colombia, los colombianos recibían la visita del Papa Francisco, mientras que en la Florida y las islas del Caribe recibieron la inesperada visita del Huracán Irma. También, ese fin de semana, hubo fuerte terremoto en México. De igual manera, a comienzos de año, hubieron fuertes inundaciones en el Perú y ataques terroristas en Europa.

En este momento, pues, me encuentro en Colombia, así que la visita del Papa Francisco ha sido importante. Es el tercer Papa que visita el país cafetero. Curiosamente, yo he estado presente en las dos últimas visitas papales. Estuve en 1986 cuando el carismático Papa Juan Pablo II visitó Colombia, y ahora, en el 2017, cuando el también carismático Papa Francisco visitó el país. Aquellas visitas se dieron en dos etapas distintas de mi vida. Y me afectó directamente, ya que el Papa pasaría cerca a donde vivo. 

Los colombianos se han estado preparando para la visita papal desde hace meses. Incluso,  finalmente, se han arreglado varios "huecos" en las calles, en los lugares donde transitaría el Sumo Pontífice. Quizás, debería venir más seguido y que transite por toda la ciudad, hay varios "huecos" que merecerían ser reparados. Además, los vendedores ambulantes vendían recuerdos de la visita, así como las librerías ponían en venta libros escritos por el Sumo Pontífice. 

En mi caso, yo fui a verlo en persona, pero, si vi el recorrido papal y algunos de sus discursos por televisión. Puedo constar que ha sido uno de los papas más carismático de la historia, con un mensaje, claro y conciso, sin andar en rodeos, y hasta le dio su bendición a los jóvenes. Hubo, si, un pequeño percance, cuando se golpeó con una parte del auto durante su visita a Cartagena de Indias, pero, aún así, continuó con el itinerario sin contratiempos. El Papa visitará Perú en Enero del próximo año.

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Por un lado, estaba el devastador Huracán Irma que llegó a tener vientos de Categoría 5. ¿Qué quiere decir eso? Destrucción total. El Huracán afectó varias islas de las antillas menores, para después, pasar por Puerto Rico, Cuba, y amenazaba al estado de la Florida en Estados Unidos. Aunque no me encontraba en la Florida en ese momento, pues, tengo amigos y familiares viviendo allá. Además, ya he tenido la mala experiencia con el Huracán Andrew de 1992 y esa experiencia, no se la recomiendo a nadie.

Todo el tiempo me la pasaba revisando en la TV y por Internet, sobre noticias del Huracán. Enviando mensajes de texto y llamadas a mis familiares residentes en la Florida. Afortunadamente, cuando llegó a Florida, el Huracán se había debilitado de categoría, pero, igual, causó mucha lluvia e inundaciones en el estado.

La visita del Huracán Irma por Cuba y la Florida nos recuerda que la fuerza de la naturaleza nos discrimina raza, sexo, religión, ni mucho menos, ideologías políticas. Viviendo en Miami, soy testigo de las divisiones políticas que ocurre en ambos países... Huracanes como Irma nos demuestran que esas divisiones políticas importan poco, como nuestra sobrevivencia. Quizás, eso lo tengamos en mente.